El Misterio de la Alegría

En el mundo que vivimos parece que lo que estamos haciendo hoy era para ayer, usualmente corriendo todo el tiempo de un lado a otro donde nos domina el stress en gran parte de lo que hacemos. Esta realidad me conduce a reflexionar y pensar, que muchos de nosotros debido a los afanes diarios olvidamos el significado de la palabra “Alegría” que está relacionado con la belleza externa que tanto nos preocupa y que por obsesión o vanidad queremos proyectar a cada instante.

En relación a esta reflexión he encontrado una clave muy buena para lograr la tan anhelada Alegría, mostrándose a través de la hermosura interna o externa, los invito a acompañarme a conocer esta clave.

No sin antes reconocer que la verdad hay que decirla y es que cuando las cosas marchan bien en nuestras vidas es muy fácil mostrar una sonrisa cálida. ¿Pero qué hacer cuando nuestro mundo circula en sentido contrario hacia donde nos dirigimos? ¿Cuál será la actitud que les mostraremos a los demás?

A propósito de esto, existe un proverbio en la Biblia que nos ayudará a lograr el resultado deseado, sin necesidad de gastar un solo centavo en productos para mejorar la apariencia, los cuales terminan decepcionándonos y al final de cuenta que tiramos cientos de dólares a la basura.

“El corazón Alegre hermosea el rostro; Mas por el dolor del corazón el espíritu se abate.” La alegría está relacionada con el buen ánimo y el gozo del corazón, en cambio el dolor tiene que ver con el sufrimiento y las situaciones negativas que ocurren a nuestro alrededor causando tristeza.

La alegría del corazón no se puede negar, porque se distingue en nuestros rostros a distancia. Quizás hoy sea un excelente día para dejar atrás lo que entristece y darle paso a lo que nos alegra que trae como regalo la hermosura interior como la exterior.

Lo que no se puede obviar, es que Jesús es el único que tiene el poder para lograr traer alegría real y duradera a nuestros corazones a pesar de los problemas que estemos atravesando.

Si pensamos que un corazón alegre puede vivir sin Jesús, lamento decirles que tal vez obtengamos un gozo temporal, pero más rápido que de carrera las dificultades apagaran el gozo y aparecerá la aflicción de espíritu que no podremos ocultar por mucho tiempo.

Finalmente en este día les animo a que reflexionemos sobre esto, algunos estudios científicos han concluido que la risa es la mejor terapia para el alma, pidámosles a Jesús mirar en lo profundo de nuestro corazón y descubrir lo que hay exactamente en el interior, para que nuestro rostro se convierta en el reflejo de lo que trasciende más allá de lo que no se percibe.

¡Bendiciones Multiplicadas!